Una luz al final de las letras / Light at the end of the letters

  
  Voy a contar los hechos: empecé en la escritura como un hobby, una forma de escapar, animado por trabajos que me obligaron a ello o por conocidos a los que les gustaron mis humildes relatos antes de reunir valor para meterme en la dura y agotadora batalla que es dar forma a una novela. A medida que escribía, las letras me gustaban más y más. Con mejor o peor calidad, terminé mi primera novela. Y después la segunda. Y la tercera. Nunca había tenido la menor esperanza de ser considerado escritor por los demás, y mucho menos de lograr dedicarme a esto profesionalmente. Esa sigue siendo una meta, aunque una meta lejana. Sé que lo que voy a decir a continuación puede tener poca importancia. Sin embargo, he recibido comentarios alabando mi forma de escribir, como, por ejemplo, dando a entender que sé asimilar o interpretar a un personaje femenino en mis novelas. Me han dicho que se han quedado con ganas de más, de leer una de mis historias completa. Han comparado una de mis novelas con la célebre obra de Dan Brown: El Código Da Vinci, poniendo por encima de ella la originalidad y la variedad o complejidad de la mía. Algunas de mis historias han llegado a ser vendidas en países extranjeros, entre ellos Francia y creo que Estados Unidos, y sin ser traducidas a sus respectivos idiomas. Algunas de mis obras han sido reclamadas por editoriales españolas y extranjeras, siendo precisamente una de esas obras de las que menos orgulloso me siento. Hasta han llegado a pedirme consejo sobre escritura.

  Es como si esto se me estuviera yendo de las manos. Es abrumador. Pero muchos me han dado fuerza para seguir con esto. Deseo que esto vaya a más y, al mismo tiempo... No lo sé. Miedo. Pero un miedo extraño. Dicen que uno escribe porque tiene algo que decir. Quiero que me lean. No por dinero o por fama. Quiero que mis obras se conozcan y difundan por doquier. Sería como si yo o mi voz estuviéramos por todas partes.

   Eso sería un gran logro. Mi logro.

_____________________________________________________________________


I will tell you the facts: I started writing as a hobby, an escape, inspired by work that forced me to do this or by known people who liked my humble stories before gathering courage to get into the hard and exhausting battle that is to shape a novel. As I wrote, the letters liked me more and more. With better or worse quality, I finished my first novel. And then the second. And the third. I never had any hope of being considered a writer by others, much less devote to achieve this professionally. That remains a goal, but a distant goal. I know what I will say next may be unimportant. However, I have received comments praising my writing, for example, implying that I can assimilate or playing a female character in my novels. I have been told that they have been wanting more, read one of my stories complete. They have compared one of my novels with the famous work of Dan Brown: The Da Vinci Code, putting above from it the originality and variety or complexity of mine. Some of my stories have to be sold in foreign countries, including France and the United States I think, without being translated into their languages. Some of my works have been claimed by Spanish and foreign publishers, being just one of those works that I feel less proud. Some people have even come to me for advice on writing.

  
It is as if this was getting out of my hands. It's overwhelming. But many have given me strength to continue with this. I want that this go ahead and at the same time... I don't know. Fear. But strange fear. They say that one person write because have something to say. I want to be read. Not for money or fame. I want that my works are known and disseminated everywhere. It would be like me or my voice were everywhere.

   
That would be a great achievement. My achievement.

Comentarios

Entradas populares de este blog

GNU MediaGoblin, servicio multimedia libre / GNU MediaGoblin, free media service

Frases de publicidad / Advertising phrases